Denisse Dreser

Durante muchos años, los mexicanos hemos depositado nuestra esperanza hacia los presidentes.

La conformidad nos ha llevado hasta un punto en el cual los ciudadanos, en vez de actuar o tratar de mejorar un poco la situación de México, solo se disponen a esperar que el Presidente resuelva los problemas del país.
La ciudadanía Mexicana poco participativa, ha creado un círculo vicioso que condena a México a un estancamiento.

Cada día, cada hora, minuto, segundo, el tiempo sigue transcurriendo y la economía no avanza, nuestro país sigue atorado, dividido, con una mala educación, lleno de empleados en vez de emprendedores, los ricos siguen siendo ricos, y lo peor, los pobres siguen siendo pobres.

Desgraciadamente la situación de México, nos ha llevado desconfiar de nuestro país, hasta ahora no hay ningún estado que invierta en su población, que la apoye y mucho menos que la eduque. Mexicanos que solo cuentan con los estudios básicos, sin ninguna carrera profesional que los ayude a ser personas emprendedoras y mucho menos competitivas. Personas que talvez y con una Licenciatura, podrían salir adelante, creando sus propias empresas y con esto ayudar al desarrollo de los pobres.

Por estadística, sabemos que 6 de cada 10 alumnos, no concluyen sus estudios básicos de matemáticas, 4 de cada 10 alumnos, no concluyen sus estudios básicos en español.

Desgraciadamente contamos con una educación, que no permite a México crecer, una educación a base de mitos, donde se preocupan por brindar respeto a las figuras importantes del pasado, en vez de preocuparse por el futuro, una educación que crea a ciudadanos nacionalistas pero con una educación atrasada.

La estadística nos dice que solo el 5 % de mexicanos entre 25 y 32 años tiene una carrera profesional. Estos mexicanos que se conforman, en vez de buscar una transformación para México, en vez de invertir en universidades, en educación, en condiciones para que se creara un capitalismo dinámico, siguen viviendo en la conformidad, y junto con esto estamos dejando muy atrás la oportunidad de crear un México inteligente, que saliera adelante y dejara de ser dependiente y convertirse en un país ganador para todos.

Los ciudadanos debemos de actuar en el nombre de nuestros intereses, ya que contamos con voz, derechos y grandes oportunidades.
Si nosotros mismos, no nos preocupamos por mejorar y dejamos todo a manos del gobierno, nos seguirán gobernando personas que solo se preocuparan por sus propios intereses.

Los ciudadanos actuamos constantemente con una gran conformidad, que en vez de ser positivos, caemos en el pesimismo y de esta manera la sociedad no puede ser movilizada y mucho menos educada, desgraciadamente la sociedad siempre pierde.
Si nosotros los ciudadanos no exigimos que las cosas cambien, nunca lo harán, si los mexicanos nos quedamos en la conformidad, nunca vamos a salir de allí.

Es triste el pensar que nuestro país no nos pertenece, ya que es rentado para los ciudadanos, ya que los únicos dueños son sus colonizadores, presidente y dictadores, por ello no nos preocupamos por el, por ello nadie lo cuida, nadie lo limpia ni lo sacude, nadie se mueve por lograr un México, de tener la fuerza de sanarlo, de creer que es posible y si es necesario volver a México a sus ciudadanos y que se den cuenta de sus derechos.

Para que sirve tener en nuestro país una educación, si la mayoría de las personas, no pueden disponer de ella.
Para que sirve ser habitantes, si no tenemos asegurado una vida digna.
En México, tenemos 40 millones de pobres y pertenecer a una clase media, en realidad es un privilegio.


Resumen y notas tomadas, de la Gran Conferencia de Denisse Dresser
http://www.youtube.com/watch?v=2M0xDorIgn0
http://www.youtube.com/watch?v=JVdrUTuFDPs
http://www.youtube.com/watch?v=af9e64ECnuk
http://www.youtube.com/watch?v=vG_gJ2BvjZE