El pasado 5 de Junio en la ciudad de Hermosillo, Sonora, se vivió una terrible tragedia al incendiarse una guardería en la cual había alrededor de 170 niños.
En punto de las 3 de la tarde, las radiofusoras y televisoras de esta misma ciudad comenzaron a realizar una cobertura de noticias, en la cual el tema principal era la tragedia que hace pocos minutos había ocurrido, la guardería ABC ubicada en la colonia Y Griega al sur de la ciudad, se había vuelto en llamas debido a una explosión que tuvo lugar en una bodega de al lado de éste centro de niños. La bodega en donde se originó el fuego comenzó a arder y poco a poco éste fue avanzando hasta que alcanzó a cubrir en llamas al lugar donde se encontraban 170 pequeñitos que al parecer estaban tomando la siesta.
Los vecinos de la colonia Y Griega, al percatarse que el fuego provenía de la guardería corrieron a auxiliar a estos niños, pero debido a la mala ubicación y malas instalaciones los vecinos no encontraron algún acceso hacía adentro del lugar y dentro de la desesperación de ver como la guardería se consumía poco a poco, un hombre que pasaba por ese lugar estrelló su camioneta contra una de las paredes de la guardería, fue tantas veces su insistencia que logró hacer un boquete por el cual los vecinos y los agentes que poco a poco iban llegando al lugar del siniestro comenzaron a sacar niños y subirlos a los carros, las personas fuera del lugar no esperaron a que llegaran las ambulancias, la situación era tan desesperante que lo único que querían lograr era que todos los niños estuvieran a salvo.
Desgraciadamente muchos de estos voluntarios tuvieron mala suerte en sus actos heroicos, por qué muchos de los niños que sacaron ya estaban sin vida y muchos otros se encontraban en una situación deprimente con la mayoría de su cuerpecito quemado.
La situación, comenzó a volverse más tensa, al momento en que los padres de familia comenzaron a llegar al lugar del siniestro, ya que al observar que la situación era extremadamente grave, muchos de ellos comenzaron a salirse de control y lo único que querían hacer, eran entrar y tratar de salvar a sus hijos.
Fuera del lugar se podían escuchar gritos y llantos de desesperación por parte de los espectadores, muchos de ellos se solidarizaron y al momento que las ambulancias llegaron comenzaron a brindarles ayuda, ya que eran demasiados niños para las ambulancias que continuamente llegaban al lugar. Algunos de los niños fueron transportados en carros de civiles que se ofrecieron a ayudar, ya que lo primordial era que los niños llegarán lo más pronto posible a algún hospital o centro médico para que fueran atendidos.
Mientras el tiempo transcurría, ya eran menos los niños que quedaban dentro y que aún esperaban ser rescatados, fueron unos pocos minutos lo que duró el rescate, pero para las personas que lo vivieron tan de cerca fueron los minutos y segundos más largos y tensos de sus vidas.
Después de que todos los niños fueron sacados de lugar, los hospitales y clínicas de la ciudad, comenzaron a llenarse con un sentimiento de angustia que embargaba los rostros de los familiares que tenían algún pequeño en esta guardería.
Fueron varios hospitales que prestaron sus servicios para atender de emergencia a estos niños, tal como el hospital Licona, Chávez, CIMA, San José, entre otros más.
Mientras los segundos avanzaban la tragedia comenzaba a crecer más y más, los padres de familia recurrían desesperados a los hospitales, pero muchos de ellos entraban a un estado de shock nervioso al percatarse que su hijo no se encontraba en ese lugar y tenia que continuar con la búsqueda de sus pequeñitos.
En cuestión de minutos, la noticia de la tragedia de la guardería ABC, paso de ser estatal a convertirse en una noticia internacional, en poco tiempo reporteros de diferentes partes de mundo abordaban aviones con rumbo a la ciudad de Hermosillo, Sonora.
En el momento en que la tragedia sucedió, el gobernador del Estado Eduardo Bours Casteló se encontraba fuera de la ciudad, pero al enterarse de tan terrible suceso considero conveniente regresar lo más pronto posible a la ciudad, para poder brindar apoyo a todas las familias que se encontraban pasando por este mal momento.
Al paso de las horas, los ciudadanos Hermosillenses brindaron su solidaridad, debido a que esta tragedia nos golpeó a todos, fue algo que sinceramente nos conmovió y nos afecto emocionalmente, con el solo hecho de imaginarnos que niños de entre 1 mes a 4 años de edad, habían sufrido quemaduras de 3er grado en un 80% de su cuerpo.
Al salir a las calles, se podía sentir aquella tensión, los medios de comunicación tanto local como nacional, seguían bombardeando información sobre el suceso que había ocurrido horas atrás y había marcado a los sonorenses.
Durante el transcurso del día, en las radiofusoras como en las televisoras locales, se voceaban nombres de niños que se encontraban en diferentes hospitales, muchos tuvieron la mala suerte de no ser identificados, debido a las quemaduras que habían sufrido era muy difícil reconocerlos. Tambien en los canales de televisión como telemax y canal 12 (televisa hermosillo), pasaban fotografías de niños que los padres no localizaban, muchos de ellos tenían el informe de que sus padres los habían buscado en todos los hospitales pero no había rastro de ellos. Así fue, como muchos de los padres supieron el paradero de sus pequeños al ser informados por los medios, de donde se encontraban.
De esta manera, el día fue pasando poco a poco, fue un transcurso bastante largo al sentir la desesperación de no tener ninguna noticia de cómo seguían los niños.
Después de una larga espera, la noticia ya había dado la vuelta al mundo, fue un suceso tan dramático que gente fuera del Estado de Sonora se unió a la causa, Nuestro País México así como nuestro país vecino Estados Unidos, se solidarizo con México y brindo su ayuda especializada de hospitales para salvar la vida de los niños. En transcurso de horas, en algunos hospitales, se decidió que los niños fueran trasladados a diferentes hospitales dentro del país así como fuera de éste. En el estado de Guadalajara, se trasladaron algunos niños para su atención en un hospital que cuenta con la atención que necesitaban los niños que sufrieron quemaduras entre 30 % y 50% de su cuerpo. Los otros niños que se encontraban en un estado más crítico, con un 80% de su cuerpo quemado, fueron trasladados al hospital Shrisners que se encuentra en Sacramento, California.
Al caer la tarde, el gobernador del estado Eduardo Bours Casteló ya se encontraba en la ciudad de Hermosillo, pero para esto, también dentro de la ciudad se encontraba el presidente de la República, Felipe Calderón, que vino desde la ciudad México para apoyar a las familias sonorenses, para evitar que el presidente pasara desapercibido tuvo acceso a los hospitales transportándose dentro de las ambulancias de estos mismos.
Cada minuto que transcurría, era mas triste para todos los sonorenses, por que se sumaban a la lista más niños que habían perdido la vida en el siniestro y muchos que murieron al estar siendo atendidos en los hospitales, la angustia se volvió cada vez más grande, los padres desesperados por tener una noticia de sus hijos y que estos no se encontraran dentro de la lista de defunciones.
Al día siguiente, la situación seguía peor, la lista sumaba más niños fallecidos y la desesperación era aún más intensa.
En los hospitales se veía la presencia de más personas que se sumaban a ayudar y a donar sangre para los niños que la necesitaran.
Los partidos políticos, que son candidatos a las próximas elecciones de este año, comenzaron a brindar tambien ayuda y apoyos a las personas que se encontraban afectadas, tambien nos percatamos que cancelaron sus eventos que tenían con sus campañas políticas, porque desgraciadamente Hermosillo, Sonora, se encontraba de luto por la muerte de tantos niños.
Durante el transcurso del día sábado, varios cuerpos de los niños fueron entregados a sus respectivos familiares, muchos fueron incinerados y otros fueron sepultados, distribuidos en los diversos panteones existentes en la ciudad de Hermosillo, algunos padres de familia decidieron trasladar los pequeñitos cuerpos fuera de la ciudad por algunos motivos los cuales no fueron expuestos.
Aunque la situación aún estaba en un estado crítico por el dolor de la pérdida de la vida de los niños, la sociedad hermosillense aún sentía esa tensión y ese miedo de saber que aún quedaban muchos niños hospitalizados y los cuales se encontraban graves de salud.
La grande pena que nos embargaba como ciudadanos, nos impulsó a ayudar un poco más, nos percatamos que las familias afectadas siguieron recibiendo apoyo durante el transcurso del día.
Desgraciadamente al amanecer domingo ya contábamos con más pérdidas, aún se podía sentir esa indignación y dolor con el solo hecho de salir a las calles. El domingo continuo siendo un día triste, más padres de familia se encontraban en cementerios sepultando a sus hijos.
A las 5 de la tarde del domingo 7 de junio, se celebró una misa, en las instalaciones del CUM, la cual era especialmente dedicada para todos aquellos niños que trágicamente perdieron la vida en el incendio. Se pudo obtener el dato de que asistieron alrededor de 5,000 personas, entre ellas padres de familia, amigos, hermanos y tambien personas que se unían a la causa de brindar apoyo a los afectados. Durante la misa, estuvo presente el cuerpo de una niña, que desgraciadamente murió unas horas antes de que ésta comenzara, y se tomo como conveniente que esta pequeña recibiera la bendición de Dios acompañada de sus familiares y de toda la gente que junto con ella sufrió el dolor del siniestro.
Casi al terminó del día, los medios de comunicación aún seguían revelando más información de lo sucedido, los televidentes, radioescuchas y lectores, sabían que esa desgracia no había terminado solo con el entierro de los pequeños, sino que este trágico suceso, se convertiría en una lucha clamando justicia.
Al comenzar la semana, el día lunes 8 de Junio, las cosas parecían calmarse poco a poco, aunque los medios de comunicación seguían bombardeando con información de los niños que aún se encontraban en un estado de salud grave.
Para más desgracia de los Hermosillenses, el día lunes 8 de junio se volvió a vivir momentos de pánico y terror al percatarse de que otra guardería estuvo en riesgo de sufrir un incendio, esto fue provocado por una persona, la cual se encontraba arreglando los cables de electricidad que se encontraban a poca distancia de la guardería, y los cuales hicieron corto circuito, que ocasionaron que las educadoras se alarmaran y comenzaran a evacuar a los niños de las instalaciones, como fue una gran alarma, llegaron las autoridades y parte del ejército a ayudar a sacar a los niños de la guardería.
Todo esto ha ocasionado que la gran psicosis crezca aún más, los padres de familia ya no confían en dejar a sus niños en estas instalaciones que brindan la ayuda y servicio para los padres que trabajan y no tienen donde cuidar a sus hijos, en algunas guarderías ya se han registrado la falta de niños, debido al temor de que ocurre algo parecido a la tragedia de la guardería ABC, que aún nos sigue llenando de tristeza y dolor al perder a vidas inocentes de una manera tan horrible y trágica.
Respecto a las investigaciones, aún siguen sin dar una buena respuesta, que era lo que había provocado este siniestro, la sociedad hermosillense cada vez comenzaba sentirse indignada por parte de las autoridades, ya que los medios de comunicación solo arrojaban hipótesis, pero dentro del dolor de los padres y familiares se transmitía esa frustración y enojo, y tal como lo mencioné anteriormente, esto se ha convertido en una lucha por buscar justicia.
Durante el transcurso de la semana, las familias y personas que se unen al dolor de los afectados, recorrieron en una marcha algunas de las avenidas principales de la ciudad de Hermosillo, Sonora, con la cual exigían que las autoridades dieran respuesta ante lo sucedido, se podía observar que muchos de los manifestantes que se encontraban en la multitud, llevaban letreros los cuales expresaba su enojo, pero tambien había otros que realmente conmovían con mensajes y fotografías de los niños fallecidos, la multitud era como una mancha blanca y algunos otros vestidos de negro que expresaban su luto y destacaban entre la multitud, ya que la mayoría vestía de color blanco.
Esto parece realmente indignante para las autoridades, que las personas tengan que llegar a ese extremo para que se pague y se haga justicia por lo sucedido el pasado 5 de junio al incendiarse la guardería ABC.
Durante el transcurso de la semana, siguieron saliendo notas en los periódicos de información acerca de los niños que aún siguen hospitalizados y tambien sobre la marcha.
Después de toda una larga semana, aún no se resuelve nada, al contrario, cada vez más se encuentran personas involucradas, que para desgracia de pocos, estos se encuentran relacionados con los partidos políticos, con el gobierno, y digo desgracia de pocos, porque ahí es donde se centra el poder, en la clase alta, que es un circulo social muy minoritario, pero que la mayoría de los políticos y gente del gobierno forma parte de él.
Cada vez más se suma la frustración y la incógnita se va agigantando, el dolor de los padres sigue siendo aún más fuerte al saber que la perdida de la vida de sus hijos estaba manejada por unos cuantos. El leer los periódicos, ver o escuchar los noticieros, y darte cuenta que aún no hay una solución, que aún no hay un responsable, que solo existen hipótesis de lo ocurrido que para muchos resulta una burla y un coraje que crece al recordar el siniestro. Tambien el observar como muchos se beneficia de la desgracia, es triste y sumamente lamentable.
Pero debido a la falta de una respuesta de las autoridades, el pasado sábado 13 de junio, se llevó a cabo una segunda marcha para exigir respuesta y presionar a las autoridades, aunque tambien es un llamado hacia ellas, que al parecer si éstas no pueden resolver nada, los mismo familiares y padres de familia tomaran justicia por su propia mano, fue lo que algunos medios de comunicación arrojaron como información.
Al terminar la marcha, las familia afectadas, recrearon una especie de altar en la Plaza Emiliana de Zubeldía, en la cual colocaron 43 cruces de madera pintadas de color blanco, las cuales representaban a cada niño que falleció en el siniestro, se podía observar tambien los nombres y algunos objetos personales de los niños fallecidos, que adornaban las cruces, entre ellos se encontraban zapatitos, ropita, muñecas, juguetes, etc., Tambien había mantas colgadas en los árboles y postes de la plaza, en los cuales había mensajes, frases y poemas escritos para los niños y otros dirigidos a los padres de éstos. Era realmente impresionante y conmovedor, el observar dibujos hechos de otros niños de algunas guarderías, en los cuales plasmaban su confusión ante lo sucedido, realmente son dibujos que no se pueden expresar con palabras, ya que te dejan en un estado de shock con el solo verlos, como la capacidad de razonamiento de los niños puede llegar tan lejos.
Han pasado ya 11 días del siniestro ocurrido en las instalaciones de la Guardería ABC, aún las investigaciones siguen, pero no ha habido una resolución, mientras tanto la pena, el dolor, la tristeza y el llanto, siguen estando presentes en nuestra vida, sabemos que este suceso tan triste será recordado para siempre, pero tenemos que aprender a vivir con ello.
La lucha por buscar justicia seguirá, pero ahora solo nos queda esperar la respuesta de las autoridades y el gobierno.
